EL AGUA: AQUÍ Y ALLÍ
Aunque me vuelva a repetir en algunos aspectos, nunca esta de más ya que continuamente el debate se reabre con respecto a la distribución del agua.
Se vuelve a hablar de sequía, de la falta de agua en los pantanos, de posibles trasvases. Los embalses están por debajo de la media de los últimos 9 años[1]. Se está planteando un trasvase del río Segre a Barcelona. Se ha aprobado un trasvase de 39 hectómetros cúbicos del Tajo- al Segura, será de los últimos ya que la cuenca del Tajo tiene la capacidad mínima que exige la ley para realizar un trasvase.
Unos hablan de que habrá agua para todos como si por decreto de ley se pudiese hacer que lloviera o se modificasen los cursos de los ríos.
Otros hablan de desaladoras, siendo bastante mas caro el metro cúbico de agua y siendo de una calidad inferior, recordando que los usuarios no están dispuestos a pagar ese coste y si obtener agua de trasvases.
Mientras tanto en España se pierde el 20 % del agua por las conducciones, algunas de ellas con una antigüedad de 30 años.[2]
Recientemente saltaba la noticia de que se ha descubierto un fraude en Madrid con tomas de agua ilegales que podría abastecer a 20.000 personas durante un año.
Se siguen planteando cultivos que no son acordes con el clima mediterráneo y en cambio se cultiva plantaciones que requieran mucho agua.
El 2,8 % del agua de la tierra se encuentra en los continentes, y de este porcentaje el 0,02 % en la superficie y el 0,62% en el subsuelo. En países como Australia el 99% del agua que se utiliza proviene de las aguas subterráneas, en España un 30%.[3]
Hay que utilizar de una manera eficaz las aguas subterráneas, evitando la sobreexplotación y las captaciones ilegales, investigar y poner en práctica la recarga artificial de acuíferos en épocas de lluvia.
El pasado 22 de Marzo fue el día Mundial del agua enmarcado en el Año Internacional del Saneamiento.
No sé si las noticias al respecto fueron tan abundantes en el sentido de sensibilizar la situación fuera de nuestras fronteras.
Más de 2.600 millones de personas carecen de saneamiento adecuado y casi el 90% de las muertes producidas en el mundo por diarreas, segunda causa de mortalidad infantil, están relacionadas directamente con un déficit en el abastecimiento de agua y saneamiento. Paradójicamente, el coste que supondría la mejora de esta situación es reducido en comparación con sus beneficios ya que por cada euro invertido se pueden ahorrar hasta ocho en costos de salud y otros servicios básicos. Se calcula que con una inversión anual de unos siete mil millones de euros (menos del 1% de los gastos militares mundiales en 2005) podrían reducirse a la mitad para 2015 el número de personas sin acceso al agua.
En el año 2000, los gobiernos de 189 estados –entre ellos el nuestro- firmaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio y, entre otras cosas, se comprometieron a reducir a la mitad para 2015 la proporción de personas que en 1990 carecían de acceso a agua y saneamiento[4]
Mejorando el saneamiento, se mejoraría la salud, el bienestar, aumentaría la agricultura y habría un aumento de la asistencia a clase de los que ahora tienen que recorrer kilómetros para tener acceso al agua.
Como puede comprobarse la cuestión del agua es muy distinta y de distinta problemática si lo vemos desde la visión local o global.
Abril 2008
[1] http://www.embalses.net/
[2] http://weblogs.madrimasd.org/remtavares/archive/2008/03/17/86794.aspx
[3] http://www.tecnociencia.es/monograficos/agua/distribucion.html
[4] http://unesdoc.unesco.org/images/0015/001584/158456s.pdf